En enero de 1852 el
alcalde es Juan Ponce Marrero, con
buenas propiedades en Arucas y en el pago de Montaña Cardones, donde tiene una
casa donde vive junto a la de su hermana, monja exclaustrada por las reformas
del ministro Mendizábal, quien al reintegrarse a la vida civil heredó esas
propiedades de sus familiares. Es «hombre
culto, muy servicial, con mucha "gramática parda"», padre de Rafael Ponce Armas, ambos con parentesco
próximo a los ya muy conocidos en la alcaldía hermanos Ponce Ponce.
Casualmente su hijo Rafael Ponce Armas ya aparece en este
año presidiendo la Junta pro-construcción del nuevo templo de San Juan que
encargó los planos al ingeniero militar José Ángel Rodrigo-Vallabriga,
residente en La Laguna y con quien tenía buena amistad. No terminó de gustar el
proyecto que más tarde planteaba una obra de hormigón armado, muy novedoso en la época,
que se desestimó por la propia Junta.
Detalle de fotografía (Fedac) |
«El 25 de marzo de 1852 fue expuesta a la veneración
pública la efigie de Ntra. Sra. de los Dolores, trabajo de don Silvestre Bello
Artiles, costando su hechura dos onzas de oro. El Sr. Beneficiado, en acción de
gracias por haber obtenido en propiedad la parroquia de Arucas, regaló a su iglesia
un hermoso cáliz de plata dorada, cuyo coste ascendió a 72 pesos, dos reales de
plata y seis cuartos. El cáliz fue consagrado por el Obispo Sr. Codina el 12 de
agosto 1852 y estrenado por el mismo donante en la función solemne celebrada el
día 15 de dicho mes y año».
Es muy probable que
estos excedentes económicos que entonces tuvo la parroquia procedían de la
redención de los censos perpetuos impuestos por los canónigos Manuel y José Álvarez de Castro Godoy, con
un tributo de 525 reales de vellón para el mantenimiento de la capilla de san
Nicolás de Bari y la celebración de su onomástica. Al final de este año el que
fuera presbítero Pedro Regalado Hernández
Armas, en este tiempo cura de la Parroquia de Sto. Domingo, compró a la
sucesora Francisca Díaz la finca llamada “El
Pino” que tenía dichas cargas, y redimió tales censos a favor de la
parroquia de Arucas por imperativo legal, cuestión que debió negociar con el
Cabildo Catedralicio, si bien no debió ser difícil pues había sido secretario
del obispo en 1851, oficio que alternó con la plaza de maestro de primeras
letras, conseguida en 1845 con la recomendación del entonces alcalde Gregorio Domingo Rodríguez Barbosa por su
formación de fraile exclaustrado.
El mismo presidente del gobierno Bravo Murillo elaboró un
proyecto constitucional en este año, redactando una norma totalmente
ultraconservadora, retrocediendo veinte años atrás, que fue rechazado
revitalizando de alguna manera al Partido Progresista que se opuso frontalmente
y logró la división de opiniones entre los correligionarios del Partido
Moderado o Conservador. De alguna forma se estaban distinguiendo dos corrientes
dentro de los "moderados", una "moderados conservadores"
más cerca de la clase monárquica-nobiliaria y otra "moderados
progresistas" más integrada por burgueses, la cual más que ideológica
pudiera ser clasista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario